La Real 
Parroquia de Santa María Magdalena, fue parte del conjunto monacal de San Pablo el Real fundado tras la reconquista de la ciudad. A este templo se traslada la parroquia de Santa María Magdalena tras la ocupación francesa y la destrucción de la parroquia original por parte de las tropas de Napoleón en 1811.
El monasterio fue siempre sede de la orden de los dominicos, religiosos dedicados a la evangelización desde su fundación, y a la lucha contra las herejías. Será también esta orden una de las primeras en llegar al nuevo mundo y acometer la evangelización por tierras americanas. Es por ello que Leonardo de Figueroa, en clara alusión al nuevo mundo, decora la linterna de la cúpula con elementos americanistas. También fue en este templo donde en 1544 fue consagrado obispo de Chiapas el sevillano Fray Bartolomé de las casas.
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Rocio Llorca Granja 